La Batalla de Nervión

La Copa llega a "semis" con un partido que bien podría ser una batalla



Una semana mas, y ya casi como de costumbre, me acerco a este blog debido a la buena aceptacion y satisfaccion que tiene escribir en la bitácora de un gran periodista y sobre todo gran amigo, Roberto Llena. Esta vez me dirijo a ustedes para hacerles el análisis previo de una de las semifinales de Copa del Rey que enfrentan al Sevilla FC y al Real Madrid.

El partido llega calentito tras el polémico video motivador de los sevillistas. La verdad es que el vídeo, creo, está siendo malinterpretado por una parte de la aficion blanca, ya que, a mi parecer, sólo busca una motivación extra de los jugadores hispalenses y no una busqueda indiscriminada de violencia contra los jugadores blancos.

Estos videos "motivadores" ya han sido usados por diversos equipos para buscar ese puntito de más en muchos de los jugadores y sobre todo de la aficion, como fue el caso del Espanyol, "la Roja", el Barcelona e incluso el propio Real Madrid.

En cuanto al tema deportivo, el equipo de "Mou" llega con un cierto clima de cansancio en muchos de sus jugadores claves hasta el momento, como es el caso de Di Maria, Ozil o el propio Cristiano. Pero este cansancio no creo que sea problema para los madridistas, ya que, este año cuentan con una motivación extra porque ya llevaban varios años sin disputar un semifinal copera como la de este miércoles.

Y que decir del Sevilla, un equipo copero por excelencia durante la última decada, llegando a rondas finales y ganando varias de las edicionies disputadas recientemente. El equipo sevillista es como los buenos toreros, de los que se crecen en las distancias cortas, y en las pequeñas faenas, hacen las grandes noches. A todo ello se une el gran momento de forma de "O FABULOSO" que aparece siempre cuando su equipo lo necesita.

Por todo ello sólo falta esperar a la hora del partido, dar las gracias a estos dos grandes equipos por no desprestigiar la copa, y disfrutar de una buena tarde-noche de futbol de calidad... ¡Agur familia!