Es increible lo que un tejido de goma y cuero puede llegar a conseguir



lunes, 30 de mayo de 2011

Llega la Final, llega el Showtime....

El eterno aspirante, Miami Heats, vs El invitado de lujo, Dallas Mavericks...

Despues de siete duros meses de lucha sin cuartel, llega la final de la NBA con, a mi entender, los dos mejores equipos de los Playoff pero, quizá, no de la liga regular.

A esta final llegan los Miami Heats después de haber eliminado en la final de conferencia a los Bulls del MVP de la liga, Derrick Rose. Los de Florida llegan a esta final con su Big Three un tanto desconocido. Lebron demostró que es, si no el mejor, uno de los mejores jugadores de la Nba, eliminando casi el solito a los Celtics. Verdugo de los Heats estos ultimos años en rondas finales de Playoff.

Pero fueron llegar los Bulls y "KING" JAMES desapareció del parquet tanto del United como del American Airlines, pero hay apareció la figura del menos esperado de los tres grandes de Miami "ESTILISMO" BOSH, mote que le acuño el gran Montes cuando CHRIS jugaba en Toronto. Bosh cuajo quizas sus mejores partidos en la NBA, en esa Final contra Chicago, cosa que agradeció su equipo puesto que JAMES no fue el de anteriores rondas y D.Wade ni estaba, ni se le esperaba.

Por el otro lado aparecen los Dallas Mavericks, del gran bávaro por excelencia de esta liga, "ROBIN HOOD" Novitzky. El alemán ha demostrado que quizá sea el mejor jugador europeo de todos los tiempos de la NBA. Ésto sin desprestigiar a PAU y sin intentar herir los sentimientos de aquellos románticos del basket que se quedan con el juego del Mozart de Sibenik, el gran Drazen Petrovic.

Dirk el solito elimino a los actuales campeones de la liga, LOS LAKERS, con actuaciones de más de 40 puntos por partido y estadísticas casi perfectas de tiro. El fade away que ha demostrado el teuton nada tiene que envidiar al del gran Kobe Bryant.

A este gran momento de forma del alemán hay que unirle el gran banquillo de los tejanos, donde un hombrecito de 1.83, con ascendencia leonesa está demostrando la clase que antes muchos le negaron, éste no es otro que el portorriquño, JJ Barea, con actuaciones casi antológicas contra defensas que le sacan casi dos cabezas...

Tampoco nos tenemos que olvidar de Terry, Marion, o Chandler... jugadores que aportan puntos, sudor y sufrimiento a partes iguales.

Por todo esto, y por todo lo que nos pueden ofrecer de nuevo estas dos grandes franquicias, solo nos queda esperar, disfrutar y hacer referencia a aquella gran frase que decía I LOVE THIS GAME... Suerte a los dos y si me tengo que mojar voy con MIAMI... ¡Agur familiaaa!

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